Sí, con campana y coleta
Sí chicas de “ahora”, estoy hablando de la moda de los 00s y
de lo fácil que lo tenéis para ligar.
Os pongo en situación (14-16 años preparándonos para salir):
Llegaban las 20:00 y te disponías a ducharte. Habías quedado a
las 21:30 en la plaza (tan pronto porque a nosotras no nos dejaban hasta tan
tarde, solo alguna afortunada que le había contado una milonga a sus padres de
dormir en casa de una amiga y se lo había tragado).
Para ambientarte, te ponías la radio que tenía tu padre en el
baño sintonizada, si tenías suerte, en Cadena Dial. Estabas a tope con las
canciones de Laura Pausini y La Oreja de Van Gogh (estabas motivadísima, sabías
que iba a ser una buena noche). Tras el baño, abrías tu armario y te disponías a
ver qué es lo que te ibas a poner esa noche. Te entraba la duda, no sabías si
ponerte la falda larga de rayas con los calentadores o los pantalones de pana de campana. Lo que peor te quedara, pues eso que te ibas a poner. De zapatos…las
zapatillas de deporte, claro está, porque nada de tacones, ¡eso era de mujeres,
de 30 para arriba! Después de elegir el modelito, la duda era que te hacías en
el pelo. Aquí ya hay más opciones: o un moño con tantas pinzas pequeñas de
colores que parecías una ferretería, tu pelo suelto planchado con la plancha de
la ropa o una coleta lo más restirada posible a poder ser con mechoncillos
diminutos de pelo que hacían de flequillo. ¿Maquillaje? un poco de rímel transparente,
brillo en los labios las más osadas ¡y zumbando! De colonia Halloween o Puzzle y
ya estabas dispuesta para salir.
Ahí estabas tú hecha un pincel, intentando que el chico
que te gusta se fijara en ti. ¿¿Pero cómo se iba a fijar?? ¡Si ibas más tapada
que una monja! Qué le iba a gustar, ¿lo repeinada que llevabas la coleta? ¿Lo
bien que se te ciñen los muslos con los pantalones? ¿Lo que resaltaban tus
labios con brillo? ¡No espera! Lo mismo se podía fijar en ti por cómo bailabas
sensualmente “La camisa negra" de Juanes. Pues la verdad es que todas hemos
tenido nuestro público, pero creo que iba más allá de lo puro físico.
¡Chicasss!, ahora os podéis poner lo que queráis. Han inventado
el “tangalon”, ¡no tenéis por qué dejar nada a la imaginación! Esos pelasssos
que se llevan ahora, esos taconassssos, ese maquillaje…eso que hace que no
sepamos si tenéis entre 14 o 34 años. Aprovechad que sois jóvenes y
emborrachaos, liaros con chicos cómo si no hubiera mañana. Haceos selfis,
posturear… ¡poneos tantos filtros que luego por la calle ni se os reconozca!
Cuánto más likes en una foto tengáis, mejor. Perread como si fuerais a ganar un concurso de Twerking. Cuánto a más chicos gustéis, mejor.
¡Aprovechad chicas, aprovechad!, que luego vendrán las modas en las que no se enseñe tanto, que sean horrendas como las que nos ha tocado vivir a nosotras, que no se mire tanto el físico y más la cabeza y el corazón, y entonces solo os quedará vuestra personalidad de ameba para llamar la atención.
Besis y amapolas para tod@s!
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